En el dinámico mundo del diseño digital, la innovación constante es esencial para mantener la competitividad y transformar ideas en productos tangibles de manera eficiente. Figma Make ha emergido como una solución revolucionaria que combina el poder de la inteligencia artificial con las herramientas de diseño colaborativo para elevar el proceso creativo a un nuevo nivel. Esta nueva función, introducida por Figma en 2025, brinda a diseñadores y equipos de producto la capacidad de probar, editar y generar diseños mediante indicaciones de lenguaje natural, todo integrado de manera fluida dentro de la plataforma Figma. El diseño es, en esencia, la resolución creativa de problemas. Sin embargo, este proceso no es lineal y cambia constantemente según la etapa en que se encuentre y los objetivos que se persigan.
Es común que muchas ideas innovadoras queden sin explorar debido a limitaciones de tiempo, herramientas o conocimientos técnicos. Aquí es donde Figma Make plantea una transformación importante. Al permitir a los usuarios generar código a partir de indicaciones textuales y editar diseños sin necesidad de partir desde cero, ofrece una forma rápida y accesible de experimentar y refinar propuestas. Una de las características destacadas de Figma Make es la posibilidad de convertir fácilmente un diseño estático en un prototipo interactivo. Tradicionalmente, dar vida a un diseño implicaba programación compleja, mucho tiempo y coordinación entre diseñadores y desarrolladores.
Figma Make simplifica este paso al permitir agregar animaciones, botones interactivos y retroalimentación en tiempo real con solo emplear comandos escritos simples. Esto elimina las barreras técnicas y facilita que cualquier miembro del equipo, independientemente de su nivel técnico, participe activamente en la creación y validación de experiencias de usuario. Además, Figma Make soporta la incorporación dinámica de datos reales a los prototipos. Esta función es esencial para testear funcionalidades con información auténtica, visualizar datos en vivo y experimentar con cómo reaccionarán los diseños en condiciones reales. La capacidad de subir archivos y conectarse con bases de datos externas extendiendo así la interactividad y funcionalidad de los prototipos, aporta una nueva dimensión a la exploración y validación de conceptos.
Otra ventaja significativa es la adaptabilidad para crear versiones responsivas en diferentes dispositivos. El diseño multiplataforma es fundamental en la actualidad, donde los usuarios interactúan con productos digitales a través de móviles, tablets y ordenadores. Con Figma Make, diseñar para distintos formatos como una app móvil o su versión de escritorio se vuelve una tarea mucho más ágil, permitiendo ajustar y probar en tiempo real sin perder la coherencia o integridad del diseño original. La colaboración en tiempo real es un pilar esencial dentro de Figma y se fortalece aún más con Make. Gracias a su integración nativa, todos los integrantes del equipo pueden trabajar simultáneamente en un mismo archivo, agregar funcionalidades, modificar interacciones y probar nuevas ideas sin necesidad de herramientas o entornos externos.
Esto fomenta un ambiente de trabajo más fluido donde las ideas se pueden iterar con rapidez y obtener retroalimentación inmediata, acortando ciclos de desarrollo y mejorando la calidad del resultado final. El enfoque de edición por “apuntar y decir” es otra innovación que facilita la comunicación entre diseñadores y la inteligencia artificial. En vez de usar comandos complejos o interfaces técnicas, basta con seleccionar un elemento dentro del diseño y describir con lenguaje natural la modificación requerida, por ejemplo, pedir que un botón dispare una animación o que un elemento responda al desplazamiento de la pantalla. Este método reduce notablemente la brecha entre la intención creativa y la implementación funcional, preservando la estructura y jerarquía del sistema de diseño. Además, Figma Make potencia un flujo de trabajo continuo que conecta la fase inicial de diseño en Figma con la publicación final, incluyendo herramientas como Figma Sites.
Esto elimina la necesidad de migrar entre distintos softwares o reconstruir el trabajo realizado, simplificando la cadena de producción desde el concepto hasta el lanzamiento y fomentando una mayor eficiencia operativa. Con respecto a la tecnología que alimenta Figma Make, actualmente utiliza el modelo Claude 3.7 Sonnet, una inteligencia artificial avanzada que comprende y ejecuta instrucciones complejas de diseño y codificación. La empresa ha anunciado que irá incorporando más modelos en el futuro, lo que asegura mejoras constantes en precisión y capacidad, adaptándose a las necesidades de diferentes usuarios y tipos de proyectos. La visión detrás de Figma Make destaca la creencia en la transformación que la inteligencia artificial trae al ámbito del diseño.
No se trata de reemplazar el trabajo profundo, minucioso y artesanal propio de esta disciplina, sino de potenciarlo, permitiendo validar ideas con mayor rapidez, explorar alternativas más diversas y comunicar conceptos con mayor claridad. Este avance también democratiza el diseño, abriendo la puerta a personas con distintos niveles de habilidad técnica para participar activamente en la creación y adaptación de productos digitales. Para equipos multidisciplinarios, Figma Make es una herramienta que reduce las barreras tradicionales entre diseño y desarrollo, fomentando un ambiente donde la creatividad fluye de manera más natural y colaborativa. Al eliminar la necesidad de conocimientos estrictos en codificación para llevar un diseño a la interactividad completa, se acelera el ritmo de innovación y se intensifica la experimentación. En resumen, Figma Make representa un cambio paradigmático en la forma en que se crea y evoluciona el diseño digital.
Su integración de IA para la transformación de diseños estáticos en experiencias interactivos, su interfaz intuitiva basada en lenguaje natural, y su capacidad para colaborar en tiempo real promueven un modelo de trabajo más eficiente, creativo y accesible. Las posibilidades que abre son ilimitadas: desde acelerar la generación de prototipos, hasta facilitar la creación de productos más refinados que respondan mejor a las necesidades de usuario. A medida que Figma sigue incorporando avances en inteligencia artificial y mejora la integración con otras herramientas y bases de datos, el futuro del diseño digital se vislumbra cada vez más prometedor. Figma Make no solo es una innovación tecnológica, sino un paso decisivo hacia un ecosistema de diseño más inclusivo, ágil y poderoso. Con Figma Make, el diseño deja de ser un proceso rígido y sectorizado para convertirse en una experiencia colaborativa, fluida y divertida, donde las ideas no solo se imaginan sino que se viven, prueban y perfeccionan con facilidad.
El potencial de esta herramienta invita a diseñadores, desarrolladores y líderes de producto a reinventar la forma en que construyen y hacen realidad sus visiones, abriendo nuevas fronteras en la creación digital.