Las Islas Marianas del Norte, un territorio estadounidense en el Pacífico, se encuentran en el centro de una revolución financiera que podría marcar un precedente histórico en la emisión de stablecoins respaldadas por entidades públicas en Estados Unidos. Un proyecto de ley que propone la creación de un token estable, denominado “Tinian Stable Token” o Marianas US Dollar (MUSD), está ganando nueva vida después de que el Senado del territorio superara el veto gubernamental mediante una votación. Esta iniciativa representa un esfuerzo por diversificar la economía local y aprovechar el potencial de la tecnología blockchain para fortalecer el sector de los juegos de azar en línea y otras industrias digitales. Aunque enfrenta preocupaciones legales y desafíos regulatorios, el debate alrededor de esta legislación ilustra cómo las comunidades pequeñas pueden posicionarse a la vanguardia de las innovaciones financieras usando herramientas digitales avanzadas. Las Islas Marianas del Norte consisten en un conjunto de pequeñas islas en el Pacífico, ubicadas al norte de Guam.
Tinian, una de estas islas y foco principal del proyecto de stablecoin, es un municipio con poco más de 2,000 residentes cuya economía depende en gran medida del turismo. En medio de la recuperación económica tras la pandemia de COVID-19, la administración local busca mecanismos innovadores para diversificar y fortalecer su economía. La propuesta de crear una stablecoin respaldada por dólares estadounidenses se presenta como una oportunidad para reinventar su estructura financiera y abrir un nuevo capítulo para los negocios digitales, incluyendo el auge de internet casinos, que tendrán la posibilidad de obtener licencias para operar online. El proyecto de ley, inicialmente presentado por el senador republicano Jude Hofschneider y copatrocinado por Karl King-Nabors, apunta a otorgar al tesorero de Tinian la autoridad para emitir, gestionar y redimir la stablecoin MUSD. Esta moneda digital estará completamente respaldada por efectivos en caja y bonos del Tesoro de Estados Unidos, garantizando la estabilidad y confianza en su valor.
La plataforma tecnológica seleccionada para la emisión es Marianas Rai Corporation, una empresa local con experiencia en blockchain, que ha elegido la cadena de bloques eCash para gestionar el MUSD. Esta cadena es un fork de Bitcoin Cash y ofrece ventajas en rapidez y eficiencia para las transacciones digitales. El camino del proyecto no ha estado exento de controversias. El gobernador Arnold Palacios vetó la ley en abril, alegando problemas legales y constitucionales y expresando inquietud sobre la capacidad del gobierno local para supervisar adecuadamente el uso del stablecoin, especialmente en la regulación del juego en línea. Palacios señaló que la actividad que regula el proyecto no puede restringirse claramente solo a Tinian, lo que añade complejidad en la aplicación y cumplimiento de la normativa.
Pese a estas objeciones, el Senado decidió exigir una segunda oportunidad a la ley tras una votación mayoritaria que anuló el veto. Durante el debate, la senadora demócrata Celina Babauta mostró preocupación por la limitada capacidad institucional para hacer cumplir la ley y fiscalizar el uso del stablecoin, especialmente en áreas sensibles como la regulación del juego y la prevención de posibles abusos. Babauta también expresó su deseo de que la economía local no se base exclusivamente en el juego, sino que se diversifique hacia otras áreas productivas. Por otro lado, el senador King-Nabors defendió la normativa como una solución rigurosa y eficiente que puede aportar transparencia al sector del juego online en Tinian, resaltando la importancia de esta iniciativa para dinamizar una economía afectada por la pandemia y generar nuevas fuentes de ingresos sin impactar negativamente el medio ambiente o requerir infraestructura física adicional. El avance del proyecto de ley coloca ahora la decisión en manos de la Cámara de Representantes de las Islas Marianas del Norte, que cuenta con 20 miembros y necesita una mayoría calificada para aprobar la ley tras el veto.
De lograrlo, las Marianas podrían convertirse en la primera entidad pública en Estados Unidos en emitir su propia stablecoin, lo que representaría un hito histórico en la relación entre la política local y la innovación tecnológica financiera. La competencia se desarrolla en paralelo con estados como Wyoming, que también aspiran a emitir sus stablecoins en los próximos meses. Este impulso local llega en un momento delicado para las regulaciones de stablecoins en Estados Unidos, ya que el Congreso ha enfrentado dificultades para avanzar con legislación federal clara que regule estas monedas digitales. Proyectos como el GENIUS Act y el STABLE Act, que buscaban establecer una estructura de supervisión para stablecoins, han perdido impulso debido a divisiones partidistas y preocupaciones sobre influencias políticas y empresariales. Esta incertidumbre federal aumenta la relevancia de iniciativas estatales y territoriales como la de Tinian, donde la necesidad de innovar y adaptarse a las nuevas tecnologías financieras es apremiante.
Desde una perspectiva tecnológica, el respaldo de MUSD mediante activos tangibles como dólares en efectivo y bonos del Tesoro añade una capa de seguridad y estabilidad a la stablecoin, alineándose con las mejores prácticas internacionales en este sector. La utilización del blockchain eCash brinda además rapidez en las transacciones y menor costo operativo con respecto a las redes tradicionales, lo que puede atraer a inversores y usuarios interesados en plataformas digitales accesibles y confiables. El caso de Tinian pone en relieve cómo territorios y gobiernos pequeños pueden aprovechar la flexibilidad regulatoria y la oportunidad que brindan las criptomonedas para impulsar el desarrollo económico local. La propuesta también evidencia los desafíos que aparecen cuando intentan conjugar innovación fintech con marcos legales tradicionales y limitaciones institucionales, un dilema común a nivel global. En conclusión, la persistencia del proyecto de ley para la emisión de una stablecoin en las Islas Marianas del Norte ilustra una nueva frontera para la experimentación financiera pública dentro del mundo cripto.
Si la Cámara de Representantes ratifica la decisión del Senado y convierte en ley la normativa, se abriría una vía inédita para que una entidad territorial de Estados Unidos gestione su moneda digital respaldada, con fuertes repercusiones para la economía local y el desarrollo tecnológico. Los retos regulatorios y la supervisión efectiva serán claves para que esta iniciativa alcance su pleno potencial y sirva de ejemplo para otras regiones. Más allá de las complejidades políticas y jurídicas, la apuesta por la stablecoin refleja el interés prioritario de fomentar un crecimiento sostenible, diversificado y basado en nuevas tecnologías que pueden transformar la economía insular y posicionarla en la vanguardia del sector financiero digital.