En un giro impactante en el mundo de las criptomonedas, un video de una audiencia judicial ha salido a la luz, capturando la angustiosa lucha de Tigran Gambaryan, un alto ejecutivo de Binance y exagente federal de los Estados Unidos. El video, que ha sido ampliamente compartido en redes sociales, muestra a Gambaryan suplicando por ayuda mientras se esfuerza por caminar hacia el estrado en el tribunal de Abuja, Nigeria, durante su segunda audiencia de fianza. Gambaryan, que ha estado recluido en la prisión de Kuje desde febrero de 2024, enfrenta graves cargos de lavado de dinero. En la grabación, se le ve cojeando visiblemente con la ayuda de una muleta, ya que un guardia de prisión se negó a brindarle apoyo, alegando que estaba fingiendo su condición médica. En un instante de desesperación, Gambaryan lucha por estabilizarse, extendiendo su mano hacia el oficial de prisión que lo ignora, causando una atmósfera tensa y emotiva en la sala.
"¡Esto es un espectáculo!", exclamó Gambaryan entre lágrimas, detallando que se le había negado el uso de una silla de ruedas y que había sido objeto de instrucciones de no recibir asistencia. Su indignación se percibe claramente en sus palabras: "Soy una persona inocente. ¿Por qué me hacen esto?" A medida que avanza la audiencia, su equipo legal presenta un argumento basado en motivos médicos, indicando que su salud se ha deteriorado dramáticamente mientras ha estado bajo custodia. Según informes de su defensa, Gambaryan sufre de una hernia discal, neumonía, malaria y amigdalitis, condiciones que lo han dejado casi incapaz de caminar normalmente. Su abogado ha solicitado su liberación inmediata para que pueda recibir el tratamiento médico urgente que necesita.
Sin embargo, la Comisión de Delitos Económicos y Financieros de Nigeria (EFCC), que lo persigue, ha desestimado las afirmaciones de su equipo legal. Argumenta que Gambaryan exagera su estado para obtener beneficios y que ha rechazado la atención médica que le fue ofrecida en la prisión. Además, la EFCC presentó registros médicos que, según ellos, demostrarían que no hay base para sus reclamaciones, aunque curiosamente, documentos cruciales, como una resonancia magnética que podría validar sus serias condiciones, se encuentran desaparecidos. Esta situación ha causado una creciente presión sobre las autoridades nigerianas. Por un lado, Gambaryan se aferra a su inocencia, mientras que su familia y abogados han expresado una creciente preocupación por su bienestar, acusando a las autoridades de negligencia y violación de derechos humanos.
Su esposa, Yuki Gambaryan, hizo un llamado emocional a los funcionarios estadounidenses, instándolos a interceder en su caso, afirmando que su esposo es un ciudadano estadounidense que está siendo privado de sus derechos básicos. “Esta situación es inhumana”, declaró Yuki en una entrevista. “Tigran necesita atención médica urgente, y debemos asegurarnos de que sus derechos sean protegidos antes de que sea demasiado tarde.” La angustiosa escena en la corte ha llamado la atención no solo de los medios locales, sino también de la comunidad internacional. El CEO de Binance, Richard Teng, también ha expresado su preocupación por Gambaryan, instando a que se tomen medidas enérgicas para mitigar lo que considera una injusticia.
“Tigran no debería ser responsabilizado por las faltas cometidas por la empresa; necesita nuestra ayuda ahora”, afirmó Teng en un comunicado. Mientras se desarrollan estos eventos, el clima en el que Gambaryan fue arrestado también ha sido objeto de examen. La represión de las criptomonedas y el escrutinio creciente sobre las actividades de las intercambios de criptomonedas han generado un ambiente de miedo y ansiedad dentro de la industria. Muchos temen que esta situación indique una tendencia más amplia hacia la criminalización de las operaciones de criptomonedas en diversas jurisdicciones. El próximo paso en este lamentable episodio legal es una nueva audiencia programada para el 4 de septiembre.
Su equipo legal permanece esperanzado de que la evidencia de su deterioro de salud persuada al tribunal para que reconsidere su solicitud de fianza. Sin embargo, la resistencia de las autoridades hace que la situación sea aún más incierta. El caso de Gambaryan es un doloroso recordatorio de cómo la incorporación de un sistema legal puede volverse contenciosa e interactuar de manera peligrosa con las nuevas fronteras de la economía digital. Desde la perspectiva de las criptomonedas, la historia de Gambaryan podría ser un punto de inflexión. La mezcla de cuestiones legales, derechos humanos y la regulación de la industria crea un clima que podría decidir el futuro de muchas operaciones en este campo.