La Fundación Wikimedia, entidad sin ánimo de lucro responsable de administrar Wikipedia, anunció el pasado 8 de mayo de 2025 que ha iniciado una impugnación legal contra las regulaciones de categorización que forman parte de la Ley de Seguridad en Línea (Online Safety Act, OSA) en el Reino Unido. Esta medida legal se centra en las graves preocupaciones que la organización tiene respecto a la posible inclusión de Wikipedia dentro de la categoría más restrictiva según dicha ley, la llamada Categoría 1, que fue diseñada originalmente para dirigir medidas hacia los sitios web considerados más riesgosos dentro del ámbito digital. El compromiso que comparte la Fundación Wikimedia con el gobierno británico, en cuanto a la promoción de espacios en línea seguros para todos, es contundente y se basa en sus objetivos de preservar la participación segura y efectiva de los internautas. Sin embargo, señalan que la aplicación de las obligaciones más estrictas de la Categoría 1 pondría en riesgo elementos fundamentales de Wikipedia, como la privacidad y seguridad de sus miles de usuarios voluntarios, además de exponer la plataforma a una mayor vulnerabilidad frente a manipulaciones y vandalismos, aspectos que podrían desviar recursos esenciales de la mejora continua de la enciclopedia en línea y sus proyectos hermanos. En los últimos años, la Fundación ha mantenido un diálogo constante con reguladores y responsables políticos del Reino Unido para buscar soluciones que mitigaran estos efectos adversos.
A pesar de estos esfuerzos, y pese a alertas contundentes desde el Parlamento y la sociedad civil, muchas de las inquietudes relacionadas con la categorización quedan sin respuesta adecuada. Las regulaciones ya están en vigor y se espera que, durante el verano de 2025, el regulador de seguridad en línea del Reino Unido, Ofcom, emita sus primeras decisiones sobre la categorización de sitios como Wikipedia. La complejidad del asunto radica en que, aunque la Fundación no cuestiona la existencia de la Ley de Seguridad en Línea ni el fundamento de las obligaciones de la Categoría 1 en general, su reto legal se enfoca exclusivamente en las nuevas regulaciones de categorización que podrían imponer estas obligaciones a Wikipedia en este año o en 2026. La preocupación central es que el alcance de las reglas es demasiado amplio y vago, capaz de afectar a servicios que no presentan riesgos graves, entre ellos proyectos sin ánimo de lucro como Wikipedia. Una de las situaciones más preocupantes gira en torno a las obligaciones de verificación y filtrado de usuarios establecidas para los servicios clasificados como Categoría 1.
Wikipedia depende de una enorme comunidad de voluntarios distribuidos en más de 300 idiomas, quienes garantizan que el contenido sea neutral, basado en hechos y bien referenciado. Estos voluntarios actúan como guardianes del conocimiento libre, corrigiendo errores, combatiendo el vandalismo y evitando la difusión de desinformación. Si Wikipedia fuese clasificada dentro de esta categoría, la Fundación tendría que aplicar mecanismos de verificación de identidad para sus usuarios. Aunque la ley no obliga a todos a verificarse, sí permite que otros usuarios —que podrían ser malintencionados— restrinjan las contribuciones y modificaciones de aquellos que no hayan pasado por el proceso. Esta dinámica podría perjudicar la calidad y actualización constante de la enciclopedia, pues el anonimato o pseudonimato, que responde a razones legítimas de privacidad y seguridad de los voluntarios, se vería comprometido.
El ecosistema de Wikipedia no se asemeja a las redes sociales para las cuales fueron diseñadas estas normas. Su naturaleza colaborativa y descentralizada exige medidas flexibles que protejan a sus usuarios de la exposición a riesgos concretos como filtración de datos, acoso o incluso represalias por regímenes autoritarios en sus países de origen. La verificación obligatoria, tal como está planteada, supondría además una carga operativa excesiva y alejada del sentido para el modelo de Wikipedia. La regulación de Categoría 1 fue concebida inicialmente para plataformas que presentan riesgos elevados para la sociedad, con enfocada atención en aspectos como el contenido ilegal, odio y abuso sistemático. No obstante, la interpretación amplia de qué constituye un sistema de recomendación de contenido o la presencia de funciones de compartir o reenviar contenido en una página web, factores contemplados en las regulaciones, pueden abarcar artificialmente proyectos como Wikipedia.
Esto ocurre aun cuando muchos de esos elementos, como la herramienta Feed de Nuevas Páginas o las recomendaciones de traducción, están diseñados para facilitar la revisión y mejora del contenido, no para promover interacción masiva o viralización problemática. Además, la medición del alcance o popularidad del sitio se basa en criterios cuantitativos que no distinguen entre visitas breves y específicas para consulta puntual, y el tiempo prolongado de exposición a contenido nocivo propio de otras plataformas. Wikipedia atrae a millones de usuarios en el Reino Unido cada mes, pero estos no consumen el contenido de la misma forma ni con los mismos riesgos inherentes a las redes sociales o aplicaciones de mensajería. Pese a las críticas académicas y sociales, que incluso han causado revuelo parlamentario, el gobierno del Reino Unido ha priorizado la rápida implementación de la Ley, dejando de lado la posibilidad de adaptar las regulaciones para proteger mejor a proyectos sin ánimo de lucro y que contribuyen al bien público. La ausencia de definiciones claras y la excesiva amplitud de las normas han llevado a esta controversia que la Fundación Wikimedia considera evitable con cambios normativos.
En otros escenarios internacionales, como la Unión Europea con su Ley de Servicios Digitales, o países como Australia, Francia y Alemania, las legislaciones similares tienden a incluir exenciones o tratamientos especiales para organizaciones benéficas o proyectos educativos. La Ley británica, por el contrario, no ha aprovechado las herramientas legislativas que le permitirían ajustar el impacto acorde a la naturaleza socialmente beneficiosa y no comercial de servicios como Wikipedia. La Constitución del Online Safety Act contempla instrumentos para evitar cargas desproporcionadas y permite a los ministros y a Ofcom implementar medidas que atiendan factores relevantes para la categorización, como el estatus jurídico o el fin público de la plataforma. En el caso de Wikipedia, estas disposiciones no han sido exploradas ni aplicadas con la amplitud necesaria, lo que motiva la acción legal en curso. El desafío judicial es urgente.
Bajo las reglas británicas para revisión judicial, la impugnación debe ejecutarse rápidamente para evitar que el regulador aplique decisiones que podrían comprometer la operatividad y seguridad de Wikipedia. De hecho, Ofcom ya ha iniciado requerimientos de información para evaluar preliminarmente la categorización de la enciclopedia. El futuro de Wikipedia en el Reino Unido, y por extensión para muchos usuarios globales, depende en buena medida de los resultados de este proceso. La Fundación Wikimedia reconoce el valor de las regulaciones para crear un ambiente digital más seguro, pero subraya que la protección de derechos humanos, privacidad y la promoción del conocimiento libre no deben verse en conflicto. La búsqueda de un equilibrio justo es fundamental para preservar el papel de Wikipedia como recurso de aprendizaje, una plataforma de colaboración ciudadana y un faro de alfabetización mediática en la era digital.
Dado que la Ley de Seguridad en Línea es una de las más extensas y con mayores exigencias en su ámbito, la complejidad normativa sumada a volúmenes significativos de guías y códigos de práctica puede dificultar una implementación precisa sin causar daños colaterales a proyectos legítimos y beneficiosos. La acción contra las regulaciones de categorización invita a un análisis profundo sobre cómo se diseñan las políticas de regulación en el entorno digital y cuál es el mejor mecanismo para aplicar salvaguardas enfocadas y justas. La defensa de la privacidad y la autonomía de los voluntarios que mantienen Wikipedia viva es una manifestación de la importancia que tiene resguardar el conocimiento abierto en la sociedad contemporánea. Mientras se espera la resolución judicial, el llamado es a un debate público informado y equilibrado que reconozca los múltiples beneficios de proyectos como Wikipedia y proteja a quienes contribuyen desinteresadamente al conocimiento compartido. La Fundación Wikimedia hace un llamado a la comunidad global a mantenerse atenta y apoyar políticas que garanticen un internet seguro, accesible y respetuoso con los valores fundamentales de libertad y diversidad.
Mantener la integridad de Wikipedia no es solo defender un sitio web, sino preservar un bien común que ha transformado la manera en que accedemos a la información en el siglo XXI.