En un movimiento que refleja la consolidación y madurez creciente dentro del sector de criptomonedas, Anchorage Digital ha anunciado la adquisición de Mountain Protocol, un emisor de stablecoins regulado por la Bermuda Monetary Authority. Esta operación destaca el interés creciente de Anchorage Digital por fortalecer sus servicios relacionados con las monedas estables, un segmento que cada vez gana más relevancia como pilar fundamental en la economía cripto moderna. Anchorage Digital, que se distingue por ser el único banco digital de activos con licencia federal en Estados Unidos, ha dado un paso estratégico para integrar el equipo, la tecnología, y el framework regulatorio de Mountain Protocol a su oferta existente. Aunque los términos financieros de la compra no fueron revelados, la transacción, que está sujeta a condiciones habituales de cierre y aprobación regulatoria, refleja la tendencia actual de convergencia entre empresas de criptomonedas y firmas tradicionales de servicios financieros, conocida como TradFi. El CEO de Anchorage, Nathan McCauley, ha destacado la importancia creciente de las stablecoins, señalando que estas se están convirtiendo en la columna vertebral de la economía cripto.
En sus palabras, se anticipa que eventualmente "todas las empresas" incorporarán stablecoins como parte integral de sus operaciones cotidianas. Esta visión subraya el rol clave que jugarán estas monedas digitales respaldadas en activos frente a la volatilidad de criptomonedas como Bitcoin o Ethereum, especialmente para actividades comerciales, pagos y transacciones internacionales. Por su parte, Martin Carrica, CEO de Mountain Protocol, destacó cómo la combinación de su experiencia en stablecoins con la robusta infraestructura de Anchorage permitirá a la entidad consolidada atender la creciente demanda global por servicios relacionados con monedas estables. Esta fusión no solo amplía la capacidad operativa de ambas compañías, sino que también fortalece su posicionamiento como actores regulados y confiables en un mercado cada vez más competitivo y vigilado por autoridades financieras. Dentro de este contexto de integración, Mountain Protocol anunció el inicio de un proceso ordenado para el cierre de su stablecoin principal, Mountain USD (USDM), que operaba como una moneda estable con rendimiento bajo un esquema de incentivos.
Desde el 12 de mayo, Mountain Protocol ha dejado de emitir nuevas unidades de USDM, aunque se mantendrán activos los incentivos por un período adicional de 30 días. Transcurrido este lapso, la tasa de rendimiento para USDM quedará establecida en 0%, marcando así el fin de su funcionamiento como stablecoin con rentabilidad. Aquellos usuarios que ostenten USDM podrán redimir sus tokens a través de la plataforma de Mountain Protocol, mientras que en el caso de holders externos, se recomienda intercambiar USDM por otras criptomonedas en los diferentes exchanges disponibles. Esta estrategia busca facilitar una transición ordenada y minimizar el impacto para los inversores y usuarios de la stablecoin. Es importante destacar que la stablecoin USDM de Mountain Protocol, basada en la cadena de bloques de Ethereum, no debe confundirse con otra moneda estable que utiliza la misma sigla USDM, perteneciente a Mehen Finance y que opera sobre la red de Cardano.
Esta aclaración evita confusiones dentro de los ecosistemas cripto, cada vez más diversificados y especializados. Desde su lanzamiento a finales de 2023, la stablecoin USDM experimentó un crecimiento significativo, alcanzando un valor de capitalización de mercado de aproximadamente 155 millones de dólares en marzo de 2024, según datos aportados por RWA.xyz. Sin embargo, en el seguimiento de su trayectoria, el valor de mercado ha descendido por debajo de los 50 millones de dólares, reflejando la volatilidad inherente en este tipo de activos y la dinámica cambiante del interes y adopción entre los usuarios. Este contexto coincide con un escenario más amplio en el que la industria cripto está experimentando un reordenamiento bajo la presión regulatoria y la necesidad de fortalecer la confianza entre sus participantes institucionales y comerciales.
Los movimientos corporativos como la de Anchorage Digital apuntan en esta dirección, buscando combinar tecnología, cumplimiento normativo y experiencia financiera para ofrecer productos más robustos, seguros y alineados con las exigencias regulatorias a nivel mundial. Además, la experiencia de Anchorage en este segmento se ha ido ampliando desde hace meses, como se reflejó en su programa de recompensas lanzado para instituciones que mantenían la stablecoin PayPal USD. Este tipo de iniciativas indican no solo un compromiso con la innovación financiera, sino también una estrategia para posicionar al banco digital en la vanguardia del ecosistema de stablecoins y servicios asociados. El cierre ordenado de USDM y la incorporación de Mountain Protocol dentro de Anchorage Digital adelantan un nuevo capítulo para las stablecoins que, aunque han demostrado ser instrumentos poderosos para la estabilidad y la interoperabilidad en el mundo cripto, enfrentan desafíos regulatorios importantes. Conceptos como las "dark stablecoins", que emergen en discusiones sobre regulaciones más estrictas, denotan un interés creciente por evitar riesgos relacionados con transparencia y seguridad para los usuarios y el sistema financiero en general.