VanEck, una reconocida firma de gestión de activos con sede en Nueva York y un portafolio que supera los 78 mil millones de dólares en activos gestionados a través de 69 ETFs, ha presentado una solicitud formal ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) para lanzar el primer fondo cotizado en bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) que rastrea el valor del token BNB, la criptomoneda nativa del ecosistema Binance. Esta noticia representa un hito significativo dentro del mundo cripto y financiero en general, pues combina la creciente demanda por vehículos de inversión regulados enfocados en criptomonedas con el interés por altcoins relevantes en el mercado. El BNB, conocido como Binance Coin, es la quinta criptomoneda más grande a nivel mundial con una capitalización de mercado que ronda los 84.4 mil millones de dólares. Desde su lanzamiento en 2017 mediante una oferta inicial de monedas (ICO), BNB ha evolucionado para convertirse en un token fundamental dentro del ecosistema de Binance, la plataforma de intercambio de criptomonedas más grande del mundo.
La importancia de Binance en la industria cripto es incuestionable, aunque también trae cierta sombra, ya que en 2023 la compañía y su fundador Changpeng Zhao, conocido popularmente como CZ, enfrentaron cargos legales en Estados Unidos relacionados con lavado de dinero y otras infracciones, incluso pasando CZ cuatro meses en prisión. La iniciativa de VanEck para crear un ETF que siga a BNB se da en un contexto marcado por un aumento considerable de solicitudes para alt-coin ETFs presentadas a la SEC desde la presidencia de Donald Trump. La política más permisiva hacia las criptomonedas durante su administración impulsó un auge en la cantidad de aplicaciones para fondos que permiten a los inversores acceder a tokens alternativos fuera del tradicional Bitcoin o Ethereum. Bloomberg reportó que más de setenta aplicaciones han sido ingresadas, cubriendo una variedad de tokens digitales como XRP, HBAR o Solana, además de BNB. El interés por un ETF de BNB está basado en la percepción de que este token puede tener un papel clave en el futuro de las cripto reservas de algunos gobiernos.
En entrevistas recientes, el fundador de Binance ha declarado que actúa como asesor de diferentes gobiernos para la creación de reservas que incluyan criptomonedas como BNB, lo que pudo haber incentivado a VanEck a acelerar la presentación de su solicitud. Aun así, el proyecto no está exento de riesgos y controversias. La vinculación directa entre BNB y Binance implica una exposición a los problemas legales y regulatorios que ha enfrentado la empresa, los cuales representan una fuente importante de incertidumbre para inversionistas. La SEC tradicionalmente ha sido cautelosa con la aprobación de ETFs relacionados con criptomonedas que podrían estar sujetas a altos niveles de volatilidad e inseguridad regulatoria. De hecho, la propuesta de VanEck ha recibido críticas por parte de analistas y expertos financieros que recuerdan que la criptomoneda está vinculada con múltiples investigaciones por lavado de dinero y delitos dentro de la industria cripto.
VanEck no es ajena al mercado de las criptomonedas reguladas en Estados Unidos. Actualmente maneja dos ETFs enfocadas en criptoactivos: el ETF de Bitcoin, llamado simplemente VanEck Bitcoin ETF (HODL), que cuenta con un volumen administrado superior a 1.4 mil millones de dólares; y el VanEck Ethereum ETF (ETHV), con aproximadamente 82 millones en activos bajo gestión. La incursión en el mundo de los altcoins mediante un fondo que sigue a Binance Coin representa un intento de capitalizar la diversificación del mercado cripto y atender a inversores que buscan alternativas más allá de las monedas digitales tradicionales. El movimiento de VanEck también refleja una tendencia más amplia del sector financiero donde las instituciones tradicionales están reconociendo la demanda de vehículos seguros y regulados para acceder a activos digitales.
Los ETFs ofrecen a los inversionistas la capacidad de exponerse a criptomonedas a través de mercados regulados, eliminando la necesidad de gestionar directamente carteras complejas o usar exchanges no regulados. En cuanto al desempeño del token BNB, la criptomoneda ha experimentado niveles significativos de volatilidad a lo largo del último año, aunque mantiene un rendimiento modestamente positivo con un aumento aproximado del 1.7% en ese período, según datos de CoinMarketCap. Las fluctuaciones de precio responden no solo a las fuerzas propias del mercado cripto sino también a noticias relacionadas con Binance, regulaciones globales y la percepción de seguridad de los tokens asociados a grandes exchanges. Por otra parte, es relevante destacar que en Europa ya existe un ETF de BNB gestionado por 21Shares, empresa reconocida por crear productos financieros relacionados con criptomonedas para el mercado europeo.
Esto da indicios de que VanEck está intentando replicar un esquema que ya ha sido probado en otras regiones, adaptándolo al contexto regulatorio de Estados Unidos, uno de los mercados financieros más grandes y estrictos del mundo. El mayor ETF de VanEck no está relacionado con criptomonedas sino con tecnología: el VanEck Semiconductor ETF (SMH), que administra cerca de 19.9 mil millones de dólares. Sin embargo, el interés por expandir la oferta al espacio cripto indica la visión estratégica de la firma para mantenerse a la vanguardia en productos de inversión innovadores. El desarrollo de la propuesta para un ETF de BNB también abre un interesante debate sobre la regulación de activos digitales vinculados a plataformas que han enfrentado problemas legales.
A medida que el ecosistema cripto crece y madura, las autoridades regulatorias están obligadas a equilibrar la protección de los inversores con el fomento de la innovación. La aprobación de un ETF de BNB podría sentar precedentes en cómo se evalúan y aceptan productos financieros ligados a tokens con historias legales complejas. En conclusión, la solicitud de VanEck para lanzar el primer ETF estadounidense que rastrea Binance Coin representa una noticia relevante para inversionistas, reguladores y entusiastas del mercado cripto. Por un lado, abre la puerta a nuevas oportunidades de inversión regulada en altcoins, una clase de activos que históricamente ha sido más difícil de acceder a través de canales tradicionales. Por otro lado, la asociación con Binance y las problemáticas legales de la compañía introducen un factor de riesgo que los interesados deben considerar cuidadosamente.
La evolución del caso dependerá en gran medida de la posición que adopte la SEC y cómo se ajusten las normativas para manejar productos financieros relacionados con criptomonedas, sentando un precedente importante para el futuro del ecosistema digital y su integración con los mercados tradicionales.