En un mundo donde la programación evoluciona a una velocidad vertiginosa, contar con herramientas eficientes y potentes se ha convertido en una necesidad fundamental para cualquier desarrollador. Zed surge como un editor de código revolucionario que combina inteligencia artificial con un rendimiento excepcional para ofrecer una experiencia de codificación sin precedentes. Construido en Rust y completamente de código abierto bajo la licencia GPL versión 3, Zed no solo destaca por su velocidad, sino también por su enfoque en privacidad, personalización y flexibilidad. Desde tiempos inmemoriales, el uso de herramientas ha sido esencial para la humanidad, y hoy en día, los programadores cuentan con modelos de lenguaje de gran escala que impulsan la creación y edición de código. En el pasado, acceder a estas capacidades implicaba copiar y pegar fragmentos desde sitios web, usar terminales, o incluso depender de versiones cerradas y poco transparentes.
Sin embargo, la llegada de Zed representa una cuarta vía, una opción que integra la inteligencia artificial en el editor de código de una manera directa, segura y eficaz. Zed fue diseñado desde cero utilizando Rust, un lenguaje conocido por su rendimiento y seguridad. El esfuerzo de sus desarrolladores se ve reflejado en la implementación detallada hasta el nivel de shaders GPU personalizados y llamadas directas a APIs gráficas del sistema operativo, lo que garantiza una experiencia visual fluida y sin interrupciones. Gracias a su código abierto, cualquier programador puede inspeccionar, modificar o contribuir al proyecto, asegurando transparencia y confianza. Una de las características más destacadas de Zed es su panel de agentes, una innovadora interfaz que permite al usuario interactuar con una inteligencia artificial capaz de entender el contexto del proyecto sin necesidad de procesos previos de indexación o entrenamiento especial.
Esto significa que al abrir el panel y dar una instrucción, el agente analiza rápidamente la base de código para ofrecer respuestas inteligentes, realizar cambios o escribir código nuevo, emulando la manera en que un programador ovsolo se orientaría en un repositorio desconocido. La interacción con el agente es simple y rápida: solo se debe escribir la petición en lenguaje natural y el agente se encarga del resto. Esto no solo ahorra tiempo en tareas rutinarias, sino que también facilita el trabajo en áreas del código menos familiares, ayudando a localizar y modificar secciones específicas sin perder la fluidez del trabajo. Pero Zed no solo brilla por su rapidez y capacidad de la IA, sino también por su profundo compromiso con la privacidad y la seguridad. Las conversaciones con el agente son privadas por defecto, y ninguna información del usuario se envía o se utiliza para entrenar modelos sin un consentimiento explícito.
Esto es especialmente relevante en un momento en que la protección de datos es un tema crítico. Además, para evitar acciones perjudiciales, el agente solicita confirmaciones antes de ejecutar comandos potencialmente riesgosos, proporcionando control total al desarrollador. El diseño del sistema considera además la comodidad del usuario; el agente puede trabajar en segundo plano, permitiendo al programador continuar con otras tareas sin interrupciones. Cuando el agente completa sus funciones, una notificación informa que el trabajo está listo para revisión. La revisión de cambios realizada por el agente se presenta en una pestaña especial con un diff unificado totalmente editable.
Esto permite a los usuarios modificar cualquier sugerencia o cambio propuesto, aprovechar funciones como la edición multilínea y la integración con servidores de lenguaje para asegurar que los ajustes cumplan con el estilo y la funcionalidad del proyecto. Una ventaja diferencial de Zed es la posibilidad de elegir y personalizar el modelo de lenguaje que impulsa al agente. Zed soporta modelos populares como Claude 3.7 Sonnet y Gemini 2.5, accesibles a través de cuentas Zed o con claves API propias.
Más aún, existe la opción de alojar modelos personalizados localmente mediante Ollama, permitiendo un control total sobre los recursos AI usados y optimizando la privacidad y el rendimiento. Los agentes no solo editan código: también pueden interactuar con linters, formateadores, servidores de lenguaje e incluso ejecutar comandos de terminal, siempre con las correspondientes confirmaciones. Las extensiones instaladas amplían aún más sus capacidades, transformando a Zed en una plataforma modular que se adapta a las necesidades específicas de cada desarrollador y proyecto. La configuración y gestión de estas herramientas es sencilla. Los usuarios pueden activar o desactivar accesos de agentes a diversos recursos, guardando esos ajustes en perfiles personalizados para cambiar rápidamente entre modalidades de trabajo.
Zed integra por defecto perfiles como Write, que habilita todas las herramientas; Ask, con consulta de solo lectura; y Minimal, para chatear con la IA sin funciones añadidas. Además, gracias al protocolo Model Context Protocol (MCP), es posible conectar el agente con servicios externos y herramientas específicas, como bases de datos, sistemas de analítica, creación de pull requests e incluso automatización con navegadores. Esto abre un abanico enorme de posibilidades para automatizar tareas complejas y mejorar la integración continua. Ejemplos prácticos de esta capacidad los ha mostrado José Valim, creador de Elixir, quien desarrolló una herramienta MCP que se integra directamente con el framework Phoenix, demostrando la flexibilidad y potencia de este enfoque. En cuanto a costo, Zed es una opción accesible y justa.
La versión básica del editor es completamente gratuita y puede usarse sin funciones AI, con todas las características estándar de un editor moderno. El acceso a las capacidades AI se ofrece mediante un sistema flexible donde los usuarios pueden traer sus propias claves API y pagarlas a los proveedores respectivos. Alternativamente, Zed ofrece planes gratuitos y de pago con cantidades limitadas de consultas al agente al mes, dando libertad para elegir el esquema que mejor se adapte a cada usuario. Este modelo responde a la filosofía de Zed de no cobrar por el acceso básico a la herramienta, sino apostar por un negocio sostenible que ofrezca características premium opcionales que mejoren la experiencia del desarrollo sin imponer costos obligatorios. En la actualidad, Zed cuenta con versiones estables para macOS y Linux.
Para usuarios de Windows, aunque la compilación desde el código fuente es posible, la versión estable está en desarrollo y se espera su lanzamiento durante 2025. Este proceso se debe a la ambición de crear un editor construido totalmente desde cero para cada sistema operativo, asegurando el máximo rendimiento y calidad. Los futuros desarrollos de Zed prometen incluir un depurador avanzado, mejoras en la colaboración entre desarrolladores y agentes AI, y una experiencia completa en Windows. Esta evolución constante muestra el compromiso del equipo para mantener a Zed como una herramienta de vanguardia en la industria. Para quienes buscan una experiencia de edición de código inteligente, rápida y privada, Zed representa una oportunidad única.
Su combinación de velocidad, apertura, personalización y avanzadas capacidades de inteligencia artificial lo convierten en el compañero ideal para cualquier proyecto, desde pequeñas tareas hasta grandes bases de código. El mundo del desarrollo de software está en permanente transformación, y herramientas como Zed no solo acompañan ese cambio, sino que lo impulsan activamente. Con Zed, la edición de código se convierte en un proceso más ágil, inteligente y seguro, permitiendo a los programadores concentrarse en lo que realmente importa: crear software de calidad que transforme realidades.